Estados Unidos y la Unión Europea llegan a un acuerdo arancelario para evitar un

Estados Unidos y la Unión Europea llegan a un acuerdo arancelario para evitar una guerra comercial Este domingo, Estados Unidos y la Unión Europea anunciaron un importante acuerdo arancelario que fija un gravamen del 15 % a productos europeos y establece compras comunitarias de energía y equipamiento militar estadounidense. El pacto se dio a conocer tras una reunión entre el Presidente de EE.UU., Donald Trump, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en el complejo de golf de Turnberry en Escocia. Según lo acordado, la UE se compromete a adquirir energía estadounidense por un valor de 750.000 millones de dólares y a invertir otros 600.000 millones adicionales, además de aumentar sus compras de material militar. Se acordaron aranceles cero para una serie de productos estratégicos, incluyendo componentes aeroespaciales, químicos, productos agrícolas, recursos naturales y materias primas. El acuerdo establece un arancel fijo del 15 % para la mayoría de las exportaciones europeas, evitando así la imposición de un arancel del 30 % que Washington amenazaba con aplicar a partir del 1 de agosto. Ambas partes acordaron seguir negociando para ampliar la lista de productos exentos y continuar fortaleciendo las relaciones comerciales. La presidenta Von der Leyen expresó que el acuerdo brinda estabilidad y certidumbre a las empresas europeas, en un momento de creciente imprevisibilidad. Destacó que el aumento en las compras energéticas ayudará a diversificar el suministro europeo y a reducir la dependencia de los hidrocarburos rusos. Esta negociación histórica entre las dos mayores economías del mundo, que representan un mercado conjunto de 800 millones de consumidores y el 44 % del PIB global, busca fortalecer la relación comercial y reducir el déficit existente. Ambos líderes se mostraron satisfechos por alcanzar un acuerdo mutuamente beneficioso y destacaron la importancia del compromiso y liderazgo en las negociaciones. La Unión Europea y Estados Unidos muestran su firme compromiso de seguir trabajando juntos para promover un comercio internacional justo y equitativo entre ambas potencias económicas.